Estendarización de la técnica molecular: NESTED PCR, para la identificación de micorrizas de la especie Glomus mosseae (cepas BEG 25 Y BEG 132) en los laboratorios de Ingeniería en Biotecnología, Sangolquí - Ecuador
En el suelo, la rizósfera constituye el lugar en el que ocurre una amplia gamma de flujos de energía y de minerales entre los componentes biológicos, físicos y químicos (Wright, 1994). Estos flujos promueven la presencia de relaciones simbióticas entre microorganismos del suelo, como los hongos, o l...
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מחבר ראשי: | |
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פורמט: | bachelorThesis |
שפה: | spa |
יצא לאור: |
2008
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נושאים: | |
גישה מקוונת: | http://repositorio.espe.edu.ec/handle/21000/962 |
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סיכום: | En el suelo, la rizósfera constituye el lugar en el que ocurre una amplia gamma de flujos de energía y de minerales entre los componentes biológicos, físicos y químicos (Wright, 1994). Estos flujos promueven la presencia de relaciones simbióticas entre microorganismos del suelo, como los hongos, o las bacterias con las plantas (Diouf, Diop & Ndoye, 2003), donde una o ambas especies se benefician a consecuencia de su coexistencia (McNaughton & Wolf, 1984). De los diferentes tipos de asociaciones existentes entre hongos y raíces de especies vegetales, la más ampliamente distribuida en el reino vegetal es la micorriza arbuscular (MA) (Smith & Read, 1997; van der Heidjen & Sanders, 2002; Rodríguez, 2004; Molina, Mahecha y Medina, 2005). La MA es una asociación simbiótica mutualista de hifas de hongos con raíces de plantas vasculares o con los rizoides de las briofitas (Herrera y Ulloa, 1998). La planta autotrófica proporciona los compuestos carbonados procedentes de la fotosíntesis al otro miembro, el hongo heterotrófico (Molina et al., 2005). El movimiento bidireccional de materiales a través de la interfase planta-hongo (Herrera y Ulloa, 1998) influye de manera esencial en las condiciones edáficas. La simbiosis permite un incremento de la adaptabilidad (salud y crecimiento), mejora la toma de nutrientes del suelo y la captación de agua por parte de la planta (Werner, 1992; Smith & Read, 1997; Diouf et al., 2003; Molina et al. 2005). Actualmente, nos enfrentamos a problemas graves de degradación de la calidad del suelo. Además de los factores abióticos que influyen en él, el hombre ha contribuido notablemente a que su deterioro vaya en aumento, debido al mal manejo que le ha dado (Sieverding, 1991;van Tuinen, Jacquot, Zhao, Gollote & Gianinazzi-Pearson, 1998; van der Heijden & Sanders, 2002) |
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